Strobbe-Barbat M, Macedo-Orrego L, Cruzado L. Síndrome de Capgras: una revisión breve. Revista de Neuro-Psiquiatría [Internet]. 12abr.2019;82(1):55. Available from: https://revistas.upch.edu.pe/index.php/RNP/article/view/3484
Descrito por primera vez en 1923 por Capgras, este síndrome que lleva su nombre, pertenece a uno de esos síndromes raros en la práctica clinica, en el que el paciente cree de forma irreductible que una persona de la familia o de su círculo de conocidos ha sido sustituida por un doble exacto. Dentro de los denominados síndromes delirantes de falso reconocimiento, este es el más conocido, con una amplia manifestación en mujeres.
Joseph Capgras nació en Verdun-sur-Garrone, Francia, en 1873. En 1898 inició la especialidad de psiquiatría en los Asilos del Sena. Posteriormente, ejerció en el Hospital Maison-Blanche, y luego en el hospital de Sainte-Anne, hasta su jubilación. Fue discípulo de Magnan, Alix Joffroy y Paul Sérieux. Junto con Paul Sérieux, escribió en 1909 el libro «Las locuras razonantes. El delirio de interpretación», obra clave en el estudio histórico de la paranoia.
El reporte que le dio el nombre al síndrome de Capgras, escrito por Capgras y Reboul-Lachaux en 1923, describió a una mujer de 53 años, de oficio costurera, con más de quince años de enfermedad, quien creía de manera delusional que ella provenía de la realeza, que era la heredera de una gran fortuna, pero que fue sustituida al nacer. De sus cinco hijos murieron tres, y ella atribuyó dos de esas muertes a un envenenamiento realizado por enemigos, y una de las muertes a un secuestro. Además, refería que su hija había sido cambiada en múltiples ocasiones por otras niñas, relatando que llegó a tener más de 2000 de estas niñas sustitutas en un periodo de 5 años. Creía también que su esposo había sido asesinado, y que había dobles que lo sustituían, habiendo por lo menos 8 dobles diferentes. Al ser internada, creía que prácticamente todo el personal tenía dobles incluyéndose a sí misma, y había también dobles de los dobles. Al parecer también tenía alucinaciones auditivas.
Sin embargo, la primera descripción del que luego se llamó síndrome de Capgras fue dada por Kahlbaum en 1866, quien había descrito el caso de una paciente que creía que había sido reemplazada por dobles.
Características clínicas
El inicio del síndrome de Capgras se puede dar en cualquier momento de la enfermedad a la que acompaña, predominando el cuadro clínico de este síndrome sobre la enfermedad de base. Existe la delusión de que un impostor ha tomado el lugar de una persona conocida, reconociendo la similitud física entre ambas, aunque recalcando sutiles diferencias entre ambos que permiten al paciente distinguir suspuestamente a uno de otro. La delusión es discriminativa, es decir, involucra personas cercanas, generalmente familiares, aunque puede haber una extensión a personas (no familiares) muy cercanas al paciente . Silva, en una serie de 29 casos, describe la frecuencia específica de cada «impostor», siendo mayor la frecuencia en familiares directos (8 pacientes falsamente identifican a su madre, 5 a su padre, 4 a un hermano y 6 a su esposa), aunque se encontró también la falsa identificación en personas no familiares (5 conocidos, 2 policías, 1 celebridad y 4 extraños). La delusión usualmente involucra a múltiples impostores, aunque también puede ser limitada a un único impostor. Ocurre frecuentemente asociado a paranoia, desrealización y despersonalización. Puede ser transitoria o persistente.
Epidemiología
El síndrome de Capgras ha sido estudiado básicamente a través de series de casos, dada su baja frecuencia. Luego del reporte inicial de Capgras en 1923, todos los casos que se reportaban eran de mujeres, hasta 1936, cuando se reportó el primer caso de un varón. Sin embargo, Merrin y colaboradores en 1976 realizaron una revisión de la literatura inglesa, encontrando un total de 46 casos reportados, de los cuales 41% eran varones y 59% mujeres. Asimismo, Joseph en 1994 realizó un estudio de 835 pacientes hospitalizados en una institución psiquiátrica, encontrando que el 3,1% de ellos presentaban síndrome de Capgras.
Tratamiento
No hay un tratamiento específico para el síndrome de Capgras. Debido al gran porcentaje de pacientes con síndrome de Capgras cuya etiología primaria es orgánica, hay que realizar un estudio completo del paciente. Estudios de neuroimágenes y electroencefalograma permitirían buscar causas neurológicas. Para detectar una enfermedad metabólica de base, habría que realizar las pruebas sanguíneas correspondientes para las enfermedades más frecuentemente asociadas a este síndrome (glucosa, hormonas tiroideas, hormona paratiroidea, dosaje de vitamina B12 y ácido fólico). Finalmente, es importante indagar sobre el uso de medicamentos o abuso de sustancias.
CONCLUSIONES
El síndrome de Capgras es caracterizado por la creencia de que un impostor de idéntica apariencia ha ocupado el lugar un conocido. Se encuentra asociado a patología orgánica subyacente en aproximadamente el 40% de los casos, principalmente a cuadros demenciales neurodegenerativos, por lo que se recomienda la evaluación exhaustiva de posibles etiologías orgánicas ante la presencia de este síndrome, especialmente cuando se presenta en adultos mayores. El estudio del síndrome de Capgras ha servido como modelo para el estudio de los circuitos neuronales encargados de la identificación de rostros conocidos.
Otros artículos
Síndromes de falsa identificación delirante
Reporte de un caso
Delirios de identificación
Aspectos neuropsicológicos, clínicos y sociales de dos casos de síndrome de Capgras
«La verdadera ignorancia no es la ausencia de conocimientos, sino el hecho de negarse a adquirirlos»
Karl Popper